Autoconsumo fotovoltaico instantaneo
Qué es el autoconsumo fotovoltaico instantáneo
Las instalaciones fotovoltaicas de autoconsumo instantáneo son sistemas generadores de energía eléctrica que están permanentemente conectados con la red pública de suministro. Estas instalaciones no tienen baterías y, por tanto, no pueden almacenar electricidad. Por ello, la electricidad que generan ha de ser consumida en el momento por el usuario; si no, será inyectada a la red (autoconsumo con excedentes), o bien se quedará sin utilizar (autoconsumo sin excedentes).
¿Cómo se produce la energía eléctrica?
La electricidad es generada por los paneles solares fotovoltaicos, que aprovechan la energía que transporta la radiación solar para generar una fuerza electromotriz.
¿Para qué sirve el inversor?
La corriente generada por los paneles solares es continua, por lo que ha de ser convertida a corriente alterna a tensión y frecuencia normalizadas (230/400 V, 50 Hz) para poder ser utilizada por los aparatos eléctricos que usamos habitualmente, así como inyectarse a la red llegado el caso. De esto se encarga el inversor u ondulador. Asimismo optimiza la energía captada por los paneles y monitoriza el funcionamiento de la instalación, controlando los parámetros que intervienen en el proceso y desconectándose de la red en caso de algún parámetro se encuentre fuera de rango.
¿Quién puede beneficiarse del autoconsumo fotovoltaico instantáneo?
Cualquier persona física o jurídica que esté consumiendo energía de la red pública y por tanto cuente con un contrato de suministro con algún comercializador de electricidad. Además debe contar con superficie disponible para la ubicación de los paneles.